Marketing para alérgicos al marketing. Marketing para empresas y sectores a los que no les gusta mucho el marketing.
En España existen una serie de empresas, e incluso sectores empresariales completos, que son alérgicos al marketing. Me refiero a algunas empresas industriales, constructoras, de la industria del puerto, transformadoras, agricultores, artistas, gran parte del sector de la obra pública, del sector químico… Hay otras empresas que no suelen hacer marketing porque no lo ven necesario, lo ven un lujo innecesario porque en su sector «va de otra manera». Otras directamente no saben que están haciendo marketing y que lo están haciendo constantemente, como los autónomos y profesionales independientes de todo tipo. Son lo que denominamos alérgicos o refractarios al marketing. Se suelen engañar a sí mismos, porque todos hacemos marketing. Solo que, a veces, no lo llamamos así.
Detrás de las palabras marketing, publicidad, promoción… hay un «estigma» que se aprecia sobre todo en ciertos sectores económicos. Cualquiera que haya trabajado en el campo de la construcción, de los servicios técnicos a empresas, en el ámbito científico/investigación (y parte del sanitario), o en la agricultura, el sector de las reparaciones navales, las empresas instaladoras, en la industria del puerto… sabe el rechazo que las propuestas de marketing provocan. No envidio a las personas que trabajen en departamentos de marketing para esos sectores alérgicos al marketing, porque yo mismo lo he hecho y conozco la lucha constante para sacar adelante proyectos que son básicos, con directivos indiferentes y propietarios que toman tu departamento como un lujo innecesario. Suelen ser las primeras víctimas en épocas de incertidumbre económica. Y debería ser al contrario.
Es tal el odio que le profesan al marketing en estos sectores y empresas, la alergia al marketing que tienen, que simplemente lo hacen disfrazándolo de otros términos. Llaman encuestas de calidad a los cuestionarios de satisfacción de clientes, «manuales técnicos» a los dossieres corporativos que utilizan para venderse, cajas/sacos/palets al packaging que personalizan para trasladar sus productos, rótulos al branding y a la publicidad plv que ponen en sus establecimientos… Personalizan los monos y buzos con el logo de la empresa, «para poder identificarnos entre nosotros». Sonríen mientras comparten fotos en Instagram del último barco que han botado para que lo vean sus amigos. O hacen fotos con su móvil de la compleja estructura metálica que han instalado en tal o cual fábrica «para su carpeta de trabajos». Todas ellas son acciones de marketing. Como todos los trabajos, se han de hacer bien, coordinada, sistemática y profesionalmente. Y, aunque pueda parecer inverosímil, un ingeniero sabe de todo menos de marketing.
Mi hipótesis es que este tipo de empresas suelen estar dirigidas de forma personalista por directivos y personal que vienen de estudios de ingenierías o del ámbito científico, donde el marketing es poco mas o menos el diablo, porque su enfoque es hacia la eficiencia y el resultado. Creen que el marketing no ofrece resultados o, en el mejor de los casos, que es un mal necesario. Estas empresas suelen también estar dirigidas por hombres (/mujeres) hechos a sí mismos, que basan su estrategia en trabajar duro y cumplir con costes, tiempos y calidades. No quieren vendehumos con ideas mas o menos mágicas que les hagan perder el tiempo y el dinero. Y muchos vendehumos ya les han tocado en la puerta y los han quemado como clientes. Lo que ellos no saben es hasta qué punto en la industria del marketing también hay empresas y profesionales que creemos en el trabajo duro, en cumplir con costes y tiempos y en ofrecer la mejor calidad posible en nuestro trabajo.
Pero sí que hacen marketing. Porque hoy, todos hacemos marketing.
Este tipo de compañías a las que el marketing les produce alergia están tan necesitadas de marketing como el resto de sectores. Necesitan mantener una unicidad de imagen, para que cualquier pequeña muestra de su labor pueda ser reconocida como propia frente a la competencia. Necesitan apoyar a sus directivos y comerciales para que, cuando se sienten a negociar con las grandes superficies, lo hagan con material promocional de calidad y datos basados en estudios de mercados que les otorguen una posición de fuerza. Necesitan tener una página web bien hecha y posicionada, porque si no jamás les encontrarán los empleadores/contratadores/instituciones públicas. Necesitan hacer inbound marketing para atraer a sus clientes sin que ellos se sientan presionados. En definitiva, necesitan del marketing como el que más. Y escondiendo la necesidad (o encargándosela al becario) no llegarán a ningún sitio. Como muestra un botón: TODAS las grandes empresas de sus sectores, repito TODAS, hacen marketing y mucho. Tienen departamentos de marketing grandes. Y son grandes gracias precisamente a eso, a que hacen marketing. No al revés.
Como sé que les gustan los datos, unos cuantos procedentes del Observatorio de la publicidad en España 2020:
- Sector de la Energía: Iberdrola y Endesa (16,6 millones de € aproximadamente en 2017), CEPSA (8,2 millones de € en 2017), REPSOL (16,7 millones de € en 2017). En 2019, un total de 75,4 millones de €.
- Sector Agrícola: invirtió 113 millones de € en marketing y publicidad sólo en 2018.
- Sector Construcción: ACS, Acciona, Ferrovial, etc… invirtieron 173 millones de € en 2018, año récord. En 2019, 67,9 millones de € ( fuente, Azarplus)
- Sector de Material de trabajo, Agropecuario e Industrial: 35,2 millones de € en 2019.
- Sector Industrial: invirtieron 2.016 millones de € en publicidad y marketing en 2018. Sólo SEAT invirtió 45,4 millones de €.
- Sector de la Limpieza: 46,7 millones de € en 2019 (fuente, Azarplus)
Los datos de inversión en marketing de aquellos alérgicos al marketing se dividen en gastos de representación, responsabilidad corporativa, marketing digital, comunicación y publicidad. Y muestran inversiones millonarias sectoriales y de las principales empresas. Todas ellos son sectores alérgicos al marketing. Pero son sectores y empresas líderes y han reconocido la necesidad de hacer marketing. Reconócela tú también y utiliza todas las herramientas que la técnica pone a tu disposición para hacer crecer tu negocio.
________________________________________________________________________________________________________________________________________
Por nuestro pasado profesional y por nuestra trayectoria empresarial, estamos especializados en trabajar con industrias y sectores en Canarias que no suelen hacer marketing y al que le tienen cierta tirria. Marcas como Santana Cazorla, Hidramar, Contratas Metalúrgicas, SCS, Granja Avícola de Teror y muchas más confiaron en nosotros y continuaron. Conocemos los hándicaps y problemas que nos vamos a encontrar y sabemos lidiar con ellos. Si eres alérgico al marketing, ponte en manos de profesionales comprometidos y serios. Hablaremos en tu idioma, sin cursiladas, palabros, conejos que salen de chisteras ni pérdidas de tiempo o malgasto de recursos. Y si a pesar de todo lo que has leído, sigues odiando el marketing, pero no te queda más remedio que hacerlo, consúltanos sin compromiso: Contacta con nosotros aquí.
